El incendio, que ha desatado una fuerte humareda visible a kilómetros de distancia, ha afectado a grandes cantidades de manglares y a numerosas especies que habitan en este importante humedal de la zona. Además, la humareda ha causado molestias a transeúntes y habitantes de la comunidad, quienes han pedido a las autoridades de Medio Ambiente que presten más atención a esta situación.
Este no es el primer incidente de este tipo en la zona. Hechos similares han ocurrido en otras ocasiones, lo que ha llevado a sospechar la presencia de manos criminales detrás de estos incendios.
"Esto no es solo un ataque a los manglares, sino a toda la biodiversidad del lugar", expresó uno de los residentes de la zona,"Nuestro ecosistema está en peligro y necesitamos que las autoridades tomen medidas para prevenir que esto vuelva a suceder".
Las autoridades aún no han emitido un comunicado oficial sobre el incidente, pero los residentes y defensores del medio ambiente exigen una investigación exhaustiva y medidas preventivas efectivas para proteger este importante ecosistema.
Mientras tanto, los residentes de la comunidad de Copey y los activistas medioambientales locales se mantienen en alerta, ansiosos por ver qué medidas tomarán las autoridades en respuesta a este devastador incidente.
El daño al ecosistema de manglares no solo pone en riesgo la biodiversidad del lugar, sino que también amenaza la economía local basada en la pesca y el ecoturismo, lo que pone en evidencia la necesidad de una acción decisiva para proteger estos valiosos recursos naturales.